Nuestro pequeñito Chester ya tiene una casa para él solito. Un adoptante al que no le ha importado su edad, solamente se ha fijado en lo bueno y simpático que es.
Como diría nuestra amiga Ana, » quien adopta a un abulito demuestra el doble de corazón de oro »
Felicidades a los dos .
Y como siempre gracias a nuestras espléndidas casas de acogida que han tenido la paciencia de esperar hasta que llegó el momento